Soltar...y gozar al enfrentar problemas

Hay veces en las que sentimos que el mundo se nos viene encima. Hay veces que nos sentimos mal con nosotros mismos. Hay veces en las que está todo bien, incluso hay veces en las que estamos demasiado bien. Pareciera que la vida es una montaña rusa de emocines, a mi me pasa que a lo largo de un día puedo pasar por todos los colores. Pero hay algo que aprendí del Señor y eso es que Él está por encima de todo sentimiento (1 Juan 3:12).

Es una lucha dirán, y si, no es facil. Pero...¿quién dijo que con Dios había gigantes?

Cuando vemos que se nos está saliendo algo de control, cuando ya no podemos manejar, o cuando nos dimos cuenta de que acabamos de chocar, ¿qué mejor decisión que entregarle la situación al Señor? ¿Qué mejor solución que clamar a Él?

Es cuestión de fé y dependencia en Cristo. Acá ayuda tener un vínculo profundo con el Señor, leer la Biblia diariamente puede ayudar a que nos lleguen sus palabras de aliento. Tomarse un tiempo para charlar con Él también. Conocerlo más nos va a ayudar más.

El Señor no quiere que nos preocupemos por nada, hay veces en las que nuestros alrededores nos transmiten una sensación horrible que nos dan ganas de desaparecer de la faz de la tierra. Hay veces que nos preocupamos, que el miedo se apodera de nosotros.

No, eso tiene que acabar.

Si leemos algunas de las historias en donde Jesús estaba con sus discípulos los regaña por no confiar. Una de ellas se encuentra en Lucas 8:22-25. Cuando uno se encuentra en una tormenta, Jesús quiere que encuentremos paz en Él, porque Él tiene poder suficiente para calmar los vientos fuertes y las olas del mar. Si recurrimos a Él, Él actuará, pero ¿qué sentido tiene seguir preocupados? Hay que demostrar fé, confianza y dependencia en Cristo. Una vez asimilada esta actitud frente a los gigantes de la vida, estos se vuelven enanos, que es lo que en realidad son, son pruebas de fé. Nos enseñan y hacen crecer, y en cuanto más rápido estemos dispuestas a dejar que el Señor tome el volante, ¡más vas a poder gozar!

No nos alegramos en cuanquier cosa, sino en el inmenso amor de Cristo, ¡eso sí que es gozar!

Asi que, mostremos que confiamos en Dios poniendo toda situación en sus manos, porque podemos estar seguras de que Él nos va a dar vuelta todo si de verdad confiamos en Él!

Soltá...y goza!!!!


Chicas a marcar diferencia, escuchen: Si tenemos a Cristo, no nos tenemos que preocupar por nada, podemos contar con el apoyo de amigas demás, pero es importante que para que podamos superar situaciones incómodas y gozar como es debido, tenémos que aprender a gozarnos en Cristo, porque en Cristo todo lo podemos! Dejá que Él tome control de la situación y sonreí, porque Él te ama y quiere que disfrutes!

"¡Vivan con alegría su vida cristiana! Lo he dicho y lo repito: ¡Vivan con alegría su vida cristiana! Que todo el mundo se dé cuenta de que ustedes son buenos y amables. El Señor viene pronto.
No se preocupen por nada. Más bien, oren y pídanle a Dios todo lo que necesiten, y sean agradecidos." Filipenses 4:4-6