¿Qué querés que te encuentre haciendo el Señor?

Es curioso...

Cuando un profesor va a entrar al aula, los alumnos se reacomodan de manera que parezca que se están portando bien, haciendo una tarea, o por lo menos en ese momento tratan de mostrar respeto en presencia de esa autoridad. Cuando un padre entra a la habitación de sus hijos, estos probablemente se aseguran de no estar matando a su hermano en ese momento. Cuando el chico que te gusta va a entrar a la habitación en la que vos estás, te asegurás de que hasta el movimiento más minimo que surga de vos sea de agrado para él o que te encuentre haciendo una actividad que le llame la atención o que sea de su interés.

Si el Señor hoy fuera a tu casa, ¿qué te gustaría que te encuentre haciendo? ¿Te gustaría que te encontrara haciendo lo que estás haciendo ahora?

Una vez me hice esa pregunta y verdaderamente me quedé muda, sobre todo por el hecho de que el Señor siempre está viendome. Me sentí una verdadera salame, siempre pensando en lo que los demás piensan de mi y preocupándome más por eso que por mantener un corazón puro las 24hs para mi Rey. La culpa y tristeza que surgen cuando me acuerdo de esto son un verdadero llamado de atención por parte de los cielos. Sin embargo me gusta que me envie notificaciones regularmente para hacerme notar esto cuando me desvío del carril.

Es un error muy grande preocuparse por agradar a los demás (ojo, tampoco digo de volverse ignorante), de la manera que sea, antes que preocuparse por cuidar nuestra actitud frente a Cristo. Incluso preocuparse (en el sentido de angustiarse) por la opinión de los demás, por más que uno esté en buena sintonía con el Señor, es un error porque muestra que nuestra confianza en Él no es genuina.

Muchas veces, cuando nos preocupamos por nuestra relación con otra persona e intentamos ocuparnos de ello, nada vamos a lograr si la conexión con Dios es correcta, porque todo borta de nuestra relación con Él. Solo parados en Él podemos ocuparnos de lo que sea que nos tengamos que ocupar, fuera de Él, no.

Miren los que dice el apostol Pablo en Gálatas 1:10 :"Yo no ando buscando que la gente apruebe lo que digo. Ni ando buscando quedar bien con nadie. Si así lo hiciera, ya no sería yo un servidor de Cristo. ¡Para mí, lo importante es que Dios me apruebe!". Dice algo verdaderamente fuerte, 'que si así lo hiciera, ya no sería un servidor de Cristo'. Vale decir que si nos preocupamos por eso, no estamos haciendo ningun buen aporte a nuestra vida de servicio y obediencia al Señor. Recuerden que no lo obedecemos por obligación, sino porque lo amamos.

Descuidar de este aspecto va a hacer que todos los demás que brotan de nuestra relación con Dios también comiencen a quedar en un segundo plano, y eso va a permitir que el enemigo encuentre algun modo de cruzarse por nuestro camino y hacernos pasar un mal rato.

¿Qué te gustaría que te encontrara haciendo Dios? Seguramente cualquier cosa que no lo entristezca...


"Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera, porque en ti ha confiado." Isaías 26:3

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